Mapuche nagche, tienes dos hijos y cuatro nietos. De profesión profesora de vestuario y técnicas especiales, y de oficio maestra curadora de semillas, habita en la comunidad Pedro Cayuqueo en la comuna de Cholchol.
Desde el año 2012 ha sido presidenta de la Agrupación de Mujeres Amuley Pu Zomo, orientada al desarrollo del turismo y la agroecología en manos de mujeres mapuche, y durante el 2019 asume también como presidenta de la Mesa de Mujeres Rurales de Cholchol. Su labor comunitaria se ha enfocado en la difusión de la cultura y lengua mapuche, construyendo para ello en 2013 la Ruka Rayentukimün, donde recibe a quienes deseen conocer sobre su cultura.
En su oficio de curadora de semillas se ha preocupado por la recuperación de semillas ancestrales de su territorio, manteniendo diversas variedades de porotos y zapallos, hortalizas como la chalota, el maíz, el tomate y el ají, y diversidad de plantas medicinales como mentas, ajenjo, toronjil y maqui. Junto a Amuley Pu Zomo se ha preocupado de revitalizar el Trafkintü, resguardando el protocolo mapuche en su realización.
“Vivir en comunidad, en comunión con la naturaleza, es algo maravilloso, ahí tú encuentras lo grande, lo pequeño, lo divino, la mano poderosa que está detrás de nosotros…, uno tiene que conocer sus raíces, eso te da estabilidad emocional y estabilidad de vida”.
Mapuche nagche, tienes dos hijos y cuatro nietos. De profesión profesora de vestuario y técnicas especiales, y de oficio maestra curadora de semillas, habita en la comunidad Pedro Cayuqueo en la comuna de Cholchol.
Desde el año 2012 ha sido presidenta de la Agrupación de Mujeres Amuley Pu Zomo, orientada al desarrollo del turismo y la agroecología en manos de mujeres mapuche, y durante el 2019 asume también como presidenta de la Mesa de Mujeres Rurales de Cholchol. Su labor comunitaria se ha enfocado en la difusión de la cultura y lengua mapuche, construyendo para ello en 2013 la Ruka Rayentukimün, donde recibe a quienes deseen conocer sobre su cultura.
En su oficio de curadora de semillas se ha preocupado por la recuperación de semillas ancestrales de su territorio, manteniendo diversas variedades de porotos y zapallos, hortalizas como la chalota, el maíz, el tomate y el ají, y diversidad de plantas medicinales como mentas, ajenjo, toronjil y maqui. Junto a Amuley Pu Zomo se ha preocupado de revitalizar el Trafkintü, resguardando el protocolo mapuche en su realización.
“Vivir en comunidad, en comunión con la naturaleza, es algo maravilloso, ahí tú encuentras lo grande, lo pequeño, lo divino, la mano poderosa que está detrás de nosotros…, uno tiene que conocer sus raíces, eso te da estabilidad emocional y estabilidad de vida”.